“Si el productor hace lo que tiene que hacer, creo que vamos a tener una muy buena zafra en rendimientos”, dijo a Dinámica Rural el productor arrocero Mario Predebon, quien narró el desarrollo de una siembra que está ahora en su recta final.

Se refirió a los diferentes desafíos, tanto en la siembra, así como los que trazan los costos y el valor del arroz. Explicó que, debido a las lluvias en la zona norte del país, para los productores de esa región resultó muy difícil sembrar en setiembre. “El gran empuje” se dio a partir de octubre, dijo.

Los productores “todo lo que tienen en la mano es sacar rendimientos”, lo que ya viene siendo “el mayor logro año a año”, pero en esta oportunidad se torna crucial, debido a los valores del arroz así como a los costos de producción. El ambiente de la cadena toda, no ya solo de los productores, es de “incertidumbre sobre lo que pueda pasar”, afirmó.

Ejemplificó que si se traza a partir de un costo de aproximadamente US$ 2.100 por hectárea, y con el arroz en US$ 10, los productores deberían “sacar 200 bolsas secas, sanas y limpias”. “Venimos con un precio que baja semestre a semestre, y con costos que no ceden, debido a la política económica que lleva el país. Es muy preocupante, muy desafiante, lo que el sector tiene para la cosecha 2026”.