El Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) lanzó el Plan nacional de lucha contra la garrapata, el que requerirá de una respuesta integral del sector público y privado, según indicó el ministro Luis Alfredo Fratti.
La garrapata representa «un desafío sanitario y económico para la ganadería», por sus impactos «en la productividad, los costos y la inserción internacional», estimados en US$ 95.000.000 por año, «o sea el 3,5% del valor de la producción primaria de carne vacuna«. Esa cifra, indicó el MGAP en la presentación, representa prácticamente «el doble de los costos estimados por bichera (US$ 49.000.000)».
“Tenemos que arrancar con un plan de shock”, dijo Fratti en rueda de prensa, subrayando que se aplicarán leyes ya existentes “que estaban en desuso” y que se trabajará en “ajustar los controles” ya que “no nos puede pasar como país exportador, ganadero, y que está en el top de los precios del mundo”, el hecho de que devuelvan contenedores de carne por residuos de medicamentos para el combate a la garrapata. “Tenemos que garantir la inocuidad del producto”, remarcó.
“Tengo mucha esperanza de que allá por noviembre, cuando empecemos con el Pasteur y un par de instituciones más que, aparentemente, también tendrían disponibilidad de vacunas contra la garrapata, nos ayuden para el control de la misma”.
El MGAP informó que el plan “tiene como meta controlar la garrapata en las zonas donde está presente y erradicarla en las zonas libres, siguiendo el enfoque de ‘Una Salud’. También busca conocer mejor la situación de esta parasitosis en el país, reducir las muertes y enfermedades por hemoparásitos, bajar la cantidad de casos en las áreas afectadas, evitar la resistencia a los tratamientos y asegurar que no haya restos de productos químicos en los alimentos de origen animal”.
